Es crítica la situación de Buenaventura el primer puerto de Colombia en el Pacífico, todos los días del 2021 se presentan ataques, combates urbanos, trayendo angustia, tristeza, miedo, y desplazamiento.
En Buenaventura han ocurrido 33 combates armados en diferentes barrios durante los primeros 33 días de 2021. Todos los días, la ciudadanía se acuesta y se levanta con el ruido de disparos de armas cortas y largas. 33 largas noches de zozobra, angustia y miedo mientras las balas se estrellan contra las fachadas de las humildes viviendas de barrios como Juan XXIII, donde ocurrió la más reciente confrontación.
¿Quiénes combaten?

Desde hace más de un año Buenaventura está cautiva por una guerra entre al menos dos vertientes de la peligrosa banda La Local, a quienes las autoridades siguen llamando delincuencia organizada, pero su actuar es más bien el de un gran cartel de droga: manejan las rutas del narcotráfico hacia Centroamérica, tienen más de 400 hombres bien armados, tienen armas largas, cortas y hasta lanzagranadas, controlan todo lo que pase en el principal puerto sobre el Pacífico colombiano.
#OigamePresidente En Buenaventura los habitantes vuelven a estar entre las balas. La población está atemorizada, escasean los huevos, el plátano, los productos básicos se han encarecido por las vacunas que tienen que pagarles a los criminales. #SOSBuenaventura #Parenestehorror
— Mábel Lara (@MabelLaraNews) February 5, 2021
Es tanto su poder, aseguran líderes sociales, que son ellos quienes deciden el precio en el mercado de artículos de la canasta familiar y otros del comercio formal e informal. “La semana pasada estuvimos sin huevos de gallina, porque a los señores se les antojó decir que nadie podía vender huevos, a menos de que los compraran a ellos al precio que pusieron”.
El brazo más grande de La Local se enfrenta con los Bustamantes, o también conocidos como La Empresa, que quiere disputarle el territorio y control criminal a alias Fidel, un temido capo quien sobrevivió de un atentado el pasado 30 de diciembre.
Mientras la mayoría de los colombianos duermen tranquilamente, en Buenaventura en estos momentos un sin número de familia no pueden conciliar el sueño. El sonido y accionar de la Guerra irrumpe sus vida
¿Hasta cuando?@AlexLopezMaya @mindefensa@SandinoVictoria @LuisAlfonsoEsc pic.twitter.com/YSnckXFcBv
— Gustavo A. Santana Perlaza. (@GustavoASantan1) February 6, 2021
Enfrentamiento y más enfrentamiento es lo que deben vivir en Buenaventura.
Escuchen el sonido de la Guerra 👤#SOSBuenaventura pic.twitter.com/fPtzrezn7i
— Gustavo A. Santana Perlaza. (@GustavoASantan1) February 4, 2021
#SOSBuenaventura familias salen desplazadas con lo q pueden. @PoliciaColombia controla la salida🤔. Urgente atención humanitaria para nuestro puerto, un estado fallido @ONUHumanRights @ONU_derechos @DefensoriaCol @LuisAlfonsoEsc @jhonmurillob @TelepacificoTV @carlosehurtado pic.twitter.com/yARpY7VEu2
— Oscar A. Lenis (@lenisoscar1) February 4, 2021
Revista Semana, así describió la guerra urbana en el puerto:
La tregua en Buenaventura se rompió horas después del atentado contra alias Fidel, uno de los cabecillas de la temible banda La Local. Esa noche del 30 de diciembre de 2020 hubo una caravana de muerte en la ciudad: hombres en moto y con fusil asaltaron varios barrios, asesinaron a siete personas y dejaron heridas a tres más.
Todo eso en menos de 60 minutos. Querían venganza y coordinaron ataques certeros contra supuestos integrantes de La Empresa, otra de las estructuras criminales del puerto. La guerra volvió a prender motores.
Lo que pasó ese día fue espeluznante por la frialdad de los asesinatos y el tránsito normalizado de hombres fuertemente armados en pleno casco urbano.
Desde ese momento Buenaventura se quedó sin los reflectores que llegan con la barbarie; la ciudad regresó a los días en que le tocaba digerir la violencia en silencio, porque lo que pase en ese rincón del Pacífico vallecaucano no es un tema que interese mucho a la prensa nacional.
Pero lo que viene pasando en Buenaventura es mucho más grave: todos los días hay enfrentamientos en los barrios Antonio Nariño y San Francisco.
La gente escucha horrorizada cómo balas de fusil y de armas cortas se estrellan contra la fachada de sus viviendas. En el puerto hay una guerra de carteles –al estilo de las golpeadas ciudades mexicanas– de la que nadie habla.La guerra es fría y despiadada, dicen algunos líderes que prefieren omitir sus nombres.
Aseguran que cada combate deja entre una y dos personas muertas; la policía, denuncian, no interfiere, y las calles de al menos tres comunas son gigantes campos de batalla cuando el sol se esconde.
El mismo alcalde de Buenaventura, Víctor Vidal, dice que lo que está ocurriendo en el principal puerto sobre el Pacífico colombiano es alarmante: “Aquí no estamos hablando de una delincuencia común o de los muchachos que hacen tiros al aire porque están borrachos. No, aquí estamos hablando de estructuras armadas que aspiran a controlar todo, incluso la delincuencia común”
#ATENCIÓN. 🚨
BUENAVENTURA SIN CONTROL.
Hoy en día es normal ver un joven con fusil de largo alcance en las calles de Buenaventura, según testigos la situación que de vive en Buenaventura es complicada por qué los homicidios se han elevados y las armas de largo alcance ya pic.twitter.com/ZDb9r22c50
— RED DE APOYO S.I.C (@RedDeApoyoSIC) January 5, 2021
Fuente: Semana.com