Voceros de la comunidad que habita la zona rural del oriente del municipio de Tuluá, en especial quienes deben transitar diariamente por la vía que conduce a San Rafael y Puerto Frazadas, se quejan cada día por el mal estado en que se encuentra el carreteable, lo que ya ha causado varios accidentes.
Los afectados acusan del deterioro de la vía al constante tránsito de trenes cañeros cargados con varias toneladas de esta gramínea, los que además han sido causantes de diversos accidentes por cuanto la vía tiene varias curvas cerradas que dificultan el paso de estos vehículos de carga pesada.
Lo grave de la situación es que los propietarios de los cultivos, quienes deben responsabilizarse por los daños en la malla vial, no responden a las inquietudes ciudadanas y el gobierno departamental sostiene que no hay presupuesto para acometer la debida reparación pues ya se comprometieron los recursos para el presente año.
Entre tanto, la carretera se deteriora cada vez más y los accidentes están a la orden del día, siendo los amantes del deporte, quienes practican ciclismo sobre esa vía, los que sufren las peores consecuencias puesto que, bien en la madrugada o al caer la noche, los cráteres se vuelven invisibles a su ojo avizor.