El pasado jueves, Twitter confirmó la suspensión temporal de la cuenta del expresidente Álvaro Uribe informándole que habría violado una de sus reglas al intentar publicar una fotografía con información personal de algunas personas.
La imagen en cuestión, según confirmó el mismo Uribe, mostraba un tablero con datos de organizaciones, personas y teléfonos que estarían detrás de las movilizaciones del paro nacional.
Son casi 5 millones de usuarios en Twitter que siguen al expresidente y que no pudieron interactuar en está red social con los trinos acerca de las movilizaciones sociales.
«Defiendo la protesta. Yo también he protestado, pero así como todos tenemos derecho a la protesta, todos tenemos la obligación de denunciar la violencia, el vandalismo, los bloqueos», dijo el expresidente en el mismo vídeo, el jueves.
Álvaro Uribe, al igual que muchos otros políticos en Colombia y en el exterior, es un tuitero muy activo, que emite opiniones, hace denuncias, comparte sus discursos en el Senado y retuitea a varios de sus copartidarios a través de la red social.
Facebook, la nueva red
Sin embargo, Uribe ha opto por otra red social: el Facebook. Desde allí publicó 73 mensajes (numerados) entre jueves, viernes y parte de sábado en los cuales compartió fotografías, vídeos y publicaciones de medios de comunicación sobre los desmanes que se presentaron en las movilizaciones en esos días.
